Y de ver tantos finales felices en las películas, una ya deja de soñar con su propia elección; se recorren vidas paralelas y todo termina en el error, en el creer que todo se perdió, esa chispa que incendiaba tanto fuego, hoy sólo es un frío viento que llega hasta el alma, pero no alcanza; falta mucho más para ese final. Una se cansa, es repetir, es soñar, es volver a imaginar. Años lejanos, kilómetros perdidos, todo suma, todo se suma. El resultado no puede ser otra cosa sino la desolación, el dolor interior, la angustia compartida.
2 comentarios:
Excelente reflexion, sñorita Irinni. Justamente estoy pasando por algo parecido.
Bogun te manda un abrazo... a pesar de uqe no tiene brazos. :P
el momento cursi de coca cola jaja, mentira, tenes mucha razón rai ;)
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